Con la firma de los gobernadores Ignacio Torres (Chubut) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos), el Ejecutivo nacional logró sumar dos nuevas adhesiones al Régimen Simplificado de Ganancias, una herramienta clave del llamado Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos. La iniciativa apunta a captar capitales no declarados, especialmente dólares fuera del sistema, con el objetivo de promover el consumo y disminuir el nivel de informalidad financiera.
El acuerdo fue suscripto este lunes en la Casa Rosada durante una reunión encabezada por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, junto al ministro de Economía, Luis Caputo, el director ejecutivo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, y el vicejefe de Gabinete, Lisandro Catalán. En el encuentro se explicó que el nuevo régimen tendrá un enfoque basado en la facturación como criterio impositivo, dejando de lado la fiscalización sobre consumos personales o variaciones patrimoniales.
Sistema “sin persecuciones” y foco en la privacidad
El Gobierno nacional promociona el nuevo esquema como “un sistema que respeta la privacidad de los ciudadanos” y como una vía para “garantizar mayor transparencia y control, sin perseguir ni invadir la vida privada de los contribuyentes”. Las provincias que adhieran al Régimen Simplificado recibirán acceso a información clave del sistema, como datos sobre facturación de personas físicas y jurídicas, así como consumos que superen los $50.000.000, umbral establecido por ARCA.
Desde el Ejecutivo también remarcaron que las provincias que no se sumen perderán ese acceso, lo que podría limitar su capacidad recaudatoria y de control tributario. El principio rector del programa —según informaron fuentes oficiales— es que “todos son inocentes hasta que ARCA demuestre lo contrario”, una máxima con la que buscan romper con lógicas anteriores de fiscalización preventiva.
Adhesiones y cautela en CABA y Provincia
Con la firma de Chubut y Entre Ríos, ya son cuatro las provincias que se sumaron formalmente a este sistema. Primero fue Catamarca, y luego Tucumán, cuyo gobernador Osvaldo Jaldo rubricó el acuerdo tras una reunión virtual con funcionarios nacionales.
Sin embargo, la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires aún no definieron su postura. La semana pasada, el titular de ARCA, Juan Pazo, mantuvo encuentros separados con los equipos económicos de ambas jurisdicciones para presentar los detalles del programa.
Por parte de CABA, participó el ministro de Economía Gustavo Arengo, acompañado por Germán Krivocapich, titular de AGIP. Fuentes cercanas al funcionario porteño calificaron la reunión como “positiva”, aunque aclararon que aún faltan precisiones para evaluar la conveniencia de sumarse.
En el caso de la provincia de Buenos Aires, el encuentro se llevó a cabo entre Pablo López, ministro de Economía, y Cristian Girard, titular de ARBA, con funcionarios del área tributaria nacional. Según trascendió, el diálogo fue cordial y técnico, y desde la provincia solicitaron también más detalles del texto legal que el Gobierno enviará al Congreso para formalizar el nuevo régimen.
Un blanqueo con rostro nuevo
El Régimen Simplificado de Ganancias se enmarca en el plan más amplio de fomentar el ingreso de capitales informales al circuito económico, particularmente los llamados “dólares en el colchón”, apelando a incentivos impositivos y menor fiscalización. El programa propone evitar la presión sobre gastos o patrimonios no justificados, y centrarse únicamente en ingresos efectivamente facturados.
Desde el Ministerio de Economía explicaron que la idea es reducir la fricción entre el contribuyente y el Estado, eliminando regímenes de información y controles cruzados que, según argumentan, generaron desconfianza en el sistema tributario durante los últimos años. Como parte del acuerdo, las provincias que adhieran se comprometen a no implementar nuevos sistemas de control que reemplacen los derogados por Nación.
El Congreso, clave en el próximo paso
El proyecto legislativo que dará marco normativo al Régimen Simplificado de Ganancias ya está en preparación y será enviado al Congreso en los próximos días. En paralelo, Nación busca asegurar una masa crítica de adhesiones provinciales que le permita exhibir consenso político y federalismo fiscal. Se estima que al menos 16 gobernadores ya manifestaron su apoyo preliminar al plan, aunque se aguarda la firma formal de cada uno.
El Gobierno considera esta herramienta como uno de los pilares de su estrategia económica, tanto por su potencial recaudatorio como por su capacidad para dinamizar el consumo en un contexto de fuerte retracción del gasto privado. A la vez, es vista como una vía alternativa al blanqueo clásico, con menor carga punitiva y mayor atractivo para quienes mantienen activos fuera del sistema bancario.