CIUDAD DE WASHINGTON: La advertencia de Donald Trump sacude la relación comercial con Canadá, en medio de crecientes tensiones por el anuncio del primer ministro Mark Carney.
El presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó con trabar el acuerdo comercial con Canadá luego de que el gobierno de Mark Carney informara que reconocerá al Estado palestino en septiembre, durante la Asamblea General de la ONU. Trump anunció en Truth Social que esta postura dificultará las negociaciones y desplegó la posibilidad de un arancel general del 35% a los productos canadienses fuera del T-MEC.
“¡Guau! Canadá acaba de anunciar que apoya la creación de un Estado para Palestina. Eso nos dificultará mucho llegar a un acuerdo comercial con ellos. ¡Ay, Canadá!”, escribió Trump en su red, profundizando el cortocircuito bilateral justo cuando ambos países intentan renegociar acuerdos para evitar nuevos gravámenes.
El giro canadiense fue presentado como respuesta al “insoportable sufrimiento” en Gaza por parte del primer ministro Carney, mencionando la obstrucción israelí a la ayuda humanitaria y la violencia de colonos en Cisjordania. También fundamentó que Hamás, considerada organización terrorista, “debe desarmarse y no puede ocupar ningún rol futuro en la gobernanza palestina”.
Israel rechazó el anuncio canadiense, considerándolo “una recompensa para Hamás” e “impedimento para lograr la liberación de rehenes y un alto el fuego en Gaza”, según expresó el Ministerio de Exteriores israelí. El conflicto se agrava tras 22 meses de ofensiva sobre Gaza, iniciada en respuesta al ataque múltiple de Hamás el 7 de octubre de 2023.
Canadá se convierte en el tercer país del G7, junto a Francia y Reino Unido, en avanzar en el reconocimiento del Estado palestino, sumándose a la presión internacional por una solución de dos Estados.
Desde Ottawa, la reacción no se hizo esperar: el primer ministro ordenó a su jefe de gabinete y al ministro de Asuntos Intergubernamentales viajar a Washington para intentar encaminar las negociaciones y evitar la imposición de aranceles. Sin embargo, tanto Trump como Carney admitieron que “no será posible llegar a un acuerdo antes del viernes”.
No es el único frente comercial abierto por Trump: el presidente estadounidense también impuso un arancel del 50% a Brasil ante el avance judicial sobre el exmandatario Jair Bolsonaro. Argumentó que la medida responde a una “persecución política” y, en paralelo, sancionó al juez Alexandre de Moraes del Supremo brasileño.
Por último, Trump anunció un arancel del 25% a productos indios y una penalización adicional por los vínculos de India con Rusia, alegando que ese país mantiene barreras comerciales elevadas y sigue comprando energía y armamento ruso en pleno conflicto ucraniano. Según Trump, estas acciones hacen “imposible un comercio justo” con Nueva Delhi.
Los recientes anuncios estadounidenses consolidan el uso de la política exterior como herramienta de presión comercial, marcada por sanciones y un clima de negociación cada vez más áspero con socios clave.
F: gs (dw, efe, ap)