Moscú: el presidente ruso sostiene que la raíz de las tensiones con Occidente es la competencia geopolítica y no las diferencias ideológicas.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, reiteró que las contradicciones entre Moscú y las potencias occidentales surgen de la búsqueda de ventajas geopolíticas por parte de Occidente, dejando de lado cualquier consideración ideológica. Según el mandatario, el colapso de la Unión Soviética no representó para Occidente una oportunidad de reconciliación, sino un momento para ampliar su influencia y fortalecer su posición estratégica en detrimento de los intereses de seguridad rusos.
Putin explicó que en el pasado existía la percepción de que las diferencias con Occidente estaban basadas en cuestiones ideológicas, pero esa visión cambió con el tiempo. El líder ruso remarcó que, incluso después de la disolución soviética, persistió el desprecio por los intereses estratégicos de Rusia. “Occidente interpretó la situación como una oportunidad para obtener una ventaja geopolítica y decidió ignorar por completo los intereses de seguridad de Rusia”, afirmó Putin, señalando que los compromisos asumidos por la OTAN de no expandirse hacia el este no se respetaron.
El mandatario subrayó que, pese a los reiterados esfuerzos rusos por transmitir sus preocupaciones, Occidente mantuvo una postura indiferente. “La ideología tal vez tenía determinada importancia, pero en la base de todas estas contradicciones radica en intereses geopolíticos. Esto es lo principal, lo fundamental”, enfatizó Putin.
Como ejemplo, mencionó la expansión de la OTAN hacia las fronteras rusas, a pesar de las promesas realizadas a Moscú de no avanzar “ni una pulgada más”. Putin también acusó a Occidente de fomentar el separatismo y el terrorismo en regiones próximas a Rusia, bajo el principio de que “todo está bien si es contra Rusia”. Según el presidente, esto se combina con un “frenesí militarista” que justifica cualquier acción bajo la premisa de una supuesta “agresividad” rusa, construyendo así una narrativa que esconde las verdaderas motivaciones geopolíticas detrás del enfrentamiento.
Putin concluyó que para Rusia resultó evidente que, mientras no se consolide como una potencia independiente y soberana, capaz de defender su futuro, “nadie nos tomará en cuenta”. Esta postura refleja la determinación de Moscú de fortalecer su soberanía y defender sus intereses estratégicos en el escenario internacional, apostando por un orden multipolar y resistiendo las presiones de Occidente.
F: gs (interfax, reu, ap)
