Buenos Aires: gastronómicos, peones rurales y empleados de seguridad negocian sumarse al fondo de cese laboral, reemplazando la indemnización tradicional y marcando un cambio estructural en los derechos laborales.
El gobierno nacional confirmó que tres gremios clave están en proceso de incorporar el fondo de cese laboral a sus convenios colectivos, en reemplazo del sistema de indemnizaciones por despido. La medida, reglamentada a fines de junio, representa un giro en la protección frente a despidos y abre un nuevo capítulo en la relación entre sindicatos, empresarios y Estado.
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, señaló que la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA), la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) y la Unión Personal de Seguridad de la República Argentina (UPSRA) trabajan en la adecuación de sus convenios para sumar este mecanismo. El modelo, inspirado en el sistema que ya utiliza la UOCRA, busca dar previsibilidad a empresas y trabajadores en sectores de alta rotación laboral.
El fondo de cese laboral se basa en aportes mensuales durante la relación laboral, que se acumulan en un fondo administrado por entidades financieras supervisadas por la CNV. Al finalizar el vínculo, el trabajador accede al monto acumulado, reemplazando así la indemnización tradicional. La adhesión es optativa y debe ser acordada en cada convenio colectivo. El porcentaje de aportes, la periodicidad y los detalles operativos se definen en la negociación sectorial.
Sturzenegger destacó que “hay varios grupos empresarios que ya me dicen que están pronto a sacarlo. Han inventado cosas espectaculares. Los sectores son Nicolás Pino, de Sociedad Rural Argentina; el gremio de los Empleados de Seguridad, que tienen rotación; y Gastronómicos también están pensando algo”. De concretarse, estos gremios se sumarían a la UOCRA, pionera en el uso del fondo de cese laboral.
La Ley Bases sancionada en julio de 2024 habilitó la creación de sistemas alternativos de cese laboral y estableció el marco para su reglamentación. El decreto y la resolución de la CNV establecen los lineamientos para la administración, inversión y disposición de los fondos, que pueden ser gestionados por bancos, sociedades de bolsa o entidades fiduciarias.
El gobierno sostiene que la reforma busca modernizar el mercado laboral, reducir la litigiosidad y dar mayor previsibilidad a empresas y trabajadores. El oficialismo insiste en que la adhesión es voluntaria y que cada sector podrá definir si adopta el fondo de cese o mantiene la indemnización tradicional. La clave estará en la negociación colectiva y en la capacidad de los sindicatos para defender los intereses de sus representados.
La implementación del fondo de cese laboral genera debate dentro del movimiento sindical y entre especialistas en derecho laboral. Mientras algunos sectores ven en el mecanismo una forma de adaptarse a las nuevas realidades del mercado de trabajo, otros advierten sobre el riesgo de pérdida de derechos y menor protección para los trabajadores despedidos. La CGT y otros gremios mantienen una postura crítica y exigen garantías de que el nuevo sistema no implique una desprotección para los asalariados.
Si bien la reglamentación ya está vigente, la implementación efectiva dependerá de los acuerdos que alcancen los gremios y las cámaras empresariales en cada sector. Por ahora, gastronómicos, rurales y seguridad son los primeros en avanzar, pero otros sindicatos observan con atención el desarrollo del proceso y evalúan sus propios pasos a seguir.
La discusión sobre el futuro del trabajo, la protección ante el despido y la flexibilidad laboral seguirá en el centro de la agenda política y sindical en la Argentina de 2025.